El Premio Nobel de Medicina Alexis Carrel dijo que en la investigación científica lo que lleva a la verdad es mucha observación. Este método, que es simple en sí mismo pero no siempre se usa, es capaz de correlacionar varios fenómenos. Por ejemplo, observando ciertos síntomas, podemos rastrear las causas, o la enfermedad que los provocó. Este método de investigación ha llevado a académicos israelíes, en colaboración con investigadores de una de las principales excelencias mundiales en investigación científica, el Instituto de Tecnología de Massachussets , a publicar un importante estudio sobre el fuerte aumento de eventos cardiovasculares de emergencia entre los menores de 40 años en Israel en correspondencia. con la administración de las vacunas anti Covid-19.
Datos del estudio israelí
Hubo un aumento de hasta un 25% de los casos que tuvieron que acudir a urgencias por problemas cardiovasculares, en jóvenes y adultos entre 16 y 39 años, entre enero y mayo de 2021, en comparación con los correspondientes periodos prepandemia y pre-vacunas. Christopher LF Sole, Eli Jaffe y Retsef Levi querían complementar los sistemas existentes de vigilancia de la seguridad de las vacunas con fuentes de datos adicionales.
Utilizando información de los servicios médicos de emergencia nacionales de Israel de 2019 a 2021, el estudio tuvo como objetivo evaluar la asociación entre las llamadas de emergencia por síndrome coronario agudo en la población de 16 a 39 años con factores potenciales que incluyen la infección por COVID-19 y las tasas de vacunación. Se detectó un aumento de más del 25% en ambos tipos de llamadas en el período enero-mayo de 2021, en comparación con los años 2019-2020. El recuento semanal de llamadas de emergencia se asoció significativamente con las tasas de vacunas de primera y segunda dosis administradas en este grupo de edad.
Relación de la vacuna con la miocarditis
Sin embargo, tal cifra no era atribuible a las personas que padecían Covid. Según los investigadores, los hallazgos plantean preocupaciones con respecto a los efectos secundarios cardiovasculares graves no detectados inducidos por la vacuna y subrayan la relación causal ya establecida entre las vacunas y la miocarditis, una causa frecuente de paro cardíaco inesperado en personas jóvenes. Los investigadores hablan explícitamente de una “relación causal entre las vacunas de ARN mensajero (ARNm) y las vacunas de adenovirus (Astrazeneca) con la miocarditis, principalmente en niños, adultos jóvenes y hasta los 40 años.
Uno de los países con tasas de vacunación más alta
El estudio del Ministerio de Salud de Israel, país con una de las tasas de vacunación más altas del mundo, califica el riesgo de miocarditis tras recibir la segunda dosis de la vacuna entre 1 en 3.000 y 1 en 6.000 en hombres de 16 a 24 años y 1 en 120.000 en hombres menores de 30 años. De las 30.262 llamadas por paro cardíaco y 60.398 por infarto, 945 (3,1%) y 3.945 (6,5%) eran pacientes de 16 a 39 años, respectivamente, de una población de casi 3,5 millones de personas en este grupo de edad. De los 834.573 casos confirmados de COVID-19 durante el período de estudio, 572.435 (68,6%) casos fueron de personas de 16 a 39 años. Entre los 5.506.398 pacientes que recibieron su primera dosis de vacunación y los 5.152.417 pacientes que recibieron su segunda dosis de vacunación, 2.382.864 (43,3%) y 2.176.172 (32, 2%) eran pacientes de 16 a 39 años, respectivamente. Los estudios sugieren que la miocarditis generalmente aparece dentro de las dos semanas posteriores a la vacunación.
Un estudio de seguimiento realizado por el Centro de Control de Enfermedades (CDC) de EE. UU. basado en los sistemas de autoinforme VAERS y V-Safe18 confirma aún más estos hallazgos. La miocarditis es una enfermedad particularmente insidiosa con múltiples manifestaciones reportadas. Existe una amplia literatura que muestra casos asintomáticos de miocarditis, que a menudo son infradiagnosticados. Además, varios estudios exhaustivos muestran que la miocarditis es una de las principales causas de muertes súbitas e inesperadas en adultos menores de 40 años y estiman que es responsable del 12-20% de estas muertes.
Por lo tanto, es una preocupación plausible que el aumento de las tasas de miocarditis entre los jóvenes pueda conducir a un aumento de otros eventos adversos cardiovasculares graves, como el paro cardíaco.
Implicaciones políticas
El documento sugiere varias implicaciones políticas importantes . En primer lugar, es importante que los programas de vigilancia de los posibles efectos secundarios de las vacunas y los resultados de la infección por COVID-19 incorporen datos de los servicios de emergencia y urgencia, además de cualquier otro dato de salud para identificar e investigar rápidamente los efectos adversos de las vacunas. En particular, se necesita una investigación oportuna para comprender mejor las causas subyacentes del aumento observado en las llamadas de emergencia cardíaca.
En segundo lugar, es fundamental concienciar a los pacientes y médicos sobre los síntomas relacionados con la vacunación, como el dolor torácico o la disnea. Esto es particularmente importante entre la población más joven y, en particular, las mujeres jóvenes, que a menudo reciben menos evaluaciones diagnósticas de eventos cardíacos adversos que los hombres. Finalmente, este estudio muestra que el problema de los efectos adversos de las vacunas se ha subestimado y subestimado en gran medida. También se necesita un cambio claro en vista de futuras dosis adicionales.
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